Desde el año 2017, se han encontrado una serie de debilidades en el protocolo de seguridad para redes WiFi, el WPA2.

El equipo de investigación Smart Home de ESET, ha desvelado una serie de vulnerabilidades de Amazon Echo, el altavoz inteligente de Amazon, que permitían ataques de reinstalación claves, conocidos como krack. Al igual, que en una generación de los lectores de Kindle, también sufrieron una serie de ataques.

En 2017, los investigadores belgas Mathy Vanhoel y Frank Piessens, que son los que encontraron las debilidades en el WPA2. Estos ataques krack se dirigían contra uno de los procesos handshaking de cuatro vías, que está diseñado para que el punto de acceso y el dispositivo puedan demostrar que comparten los credenciales correctos para el cifrado de tráfico.

En los últimos años, la mayoría de los hogares se han convertido en inteligentes debido a los dispositivos patentados por compañías como Amazon, que han hecho posible una vida más fácil para la sociedad. En cambio, los esfuerzos que se están haciendo por securizar no están dando sus frutos.

La primera generación Echo y la octava generación Kindle, han estado afectadas por vulnerabilidades krack que permitían a los cibercriminales poder ejecutar un ataque de denegación del servicio o poder obtener cualquier información transmitida por la víctima, provocar la pérdida de datos, o por último interceptar interceptar datos.