En este artículo vamos a hablar sobre los servicios y la seguridad en la nube y los riesgos que supone para las empresas el hecho de tener todos sus datos guardados en la nube.

Hoy en día los servicios y la seguridad en la nube han crecido exponencialmente y las empresas los utilizan en gran medida, ya que suponen un abaratamiento de los costes. Además, la implantación se realiza de forma rápida y eficaz.

¿Qué es la nube?

La nube se refiere a servidores a los que se accede a través de Internet y al software y bases de datos que se ejecutan en esos servidores. Los servidores de la nube se ubican en centros de datos por todo el mundo.

Con la nube, no es necesario que los usuarios y las empresas gestionen los servidores físicos ni que ejecuten aplicaciones de software en sus ordenadores. La nube permite a los usuarios acceder a los mismos archivos y aplicaciones desde diferentes dispositivos, debido a la localización de los servidores en un centro de datos, y no de forma local en el dispositivo.

Para las empresas, este cambio a la nube supone menos gastos generales y de TI, ya que, por ejemplo, no tienen que actualizar y mantener sus propios servidores.

Esto ayuda en gran medida a las pymes, que no tienen la capacidad de pagar su propia infraestructura interna, pero pueden externalizar sus necesidades por menos dinero mediante la nube.

Además, gracias a la nube las empresas tienen más fácil el hecho de operar a nivel internacional, ya que los empleados y clientes pueden acceder a los mismos archivos y aplicaciones desde cualquier sitio.

Sin embargo, tener los servicios en la nube tiene ciertos riesgos que las empresas deben tener en cuenta. Éstas deben conocer cómo se van a tratar sus datos, en el caso de que se vean afectados por un ciberataque.

Riesgos para las empresas

Las empresas que utilicen los servicios en la nube pueden encontrarse con algunos riesgos para su seguridad.

En primer lugar, las configuraciones incorrectas en la configuración de seguridad en la nube son una de las causas de las filtraciones de datos en la nube. Además, al acceder a la nube desde la internet pública, esto supone que sea más fácil para un ciberdelincuente obtener acceso no autorizado a los recursos en la nube de una empresa.

Por otro lado, se puede dar el secuestro de cuentas porque los empleados de la empresa tengan contraseñas débiles y este es uno de los problemas en la nube más graves. Esto es así porque si un atacante consigue las credenciales de un empleado, puede acceder a datos confidenciales y puede tener un control total sobre su cuenta en línea.

Otro riesgo para las empresas es el intercambio externo de datos ya que, aunque la nube está diseñada para facilitarlo, el intercambio de recursos a través de enlaces, por ejemplo, puede dificultar el control del acceso al recurso compartido. Si alguien envía un enlace a una persona incorrecta, podría provocar un acceso no autorizado al recurso.

Asimismo, puede haber usuarios internos malintencionados, que tienen acceso autorizado a la red de la empresa y a los recursos confidenciales.

Algunos otros riesgos son los ciberataques, los ataques de denegación de servicio, la pérdida o fuga de datos, entre otros.

Teniendo en cuenta todos estos riesgos y trabajando para que no ocurran y proteger la seguridad en la nube, se podrá mantener protegida la empresa y a salvo de ciberataques.